¿Tiene sentido tratar de evitar que
se alarme la sociedad tras ser decretado por el Gobierno el estado de alarma a
causa de la pandemia por coronavirus?
Diariamente se nos informa del número
total de contagiados y de fallecidos en todo el territorio nacional a causa del
Covid-19, así como de la evolución porcentual de ambas cifras, sin reparar, así
parece desprenderse, en los niveles de inquietud que el crecimiento cotidiano
de ambas incidencias genere en la población. Sin embargo, cuando se desciende
al ámbito provincial, y mayormente al municipal, niveles en los que habitualmente
la democracia como los derechos cívicos bajan algunos escalones, observamos que
se desconocen el número de infectados como el de posibles defunciones. Ningún
medio de comunicación provincial ni municipal hace referencia alguna al
respecto. El silencio informativo acompaña al silencio fantasmal de las calles
vacías.
Soldado español protegido contra el coronavirus
En mi pueblo-ciudad (Tuy), que tiene más
de pueblo que de ciudad, como también en la comarca del Baixo Miño, en la que
se encuadra, tal falta de noticias podría llevarnos al supuesto tranquilizador de
que el coronavirus no ha llegado a estos parajes (razón a mayores para creer que
son paradisíacos). Pero el incontrolable y tradicional correo popular boca-oreja,
también llamado radio macuto, a falta de otra radio que informe, corre ahora, debido
al confinamiento, por las redes sociales y la telefonía, para ponernos al corriente;
si bien pasado de voltaje dada su tendencia catastrofista de engordar los
acontecimientos cual bola de nieve ladera abajo, lo cual redunda en mayor
alarma.
Instalación de campaña para atender a infectados por Covid-19
Dejando a un lado el hecho de que se
nos está sustrayendo el derecho a la información, de que se nos trata como si fuésemos inmaduros, incapaces
de gestionar la realidad (solo somos adultos responsables cuando se trata de
trabajar y pagar impuestos), y dado que estamos inmersos en una situación de alarma declarada oficialmente
a causa de una enfermedad extremadamente
contagiosa, cabe preguntarse si el tratar de tranquilizar a la gente ¿no incide
acaso en el relajamiento de las medidas profilácticas a guardar por todos contra el
virus? ¿Y que el decaimiento del estado
de alerta aumenta el riesgo de contagio
y propagación de la pandemia?
El paternalismo emocional
que administran las instituciones para con sus conciudadanos no solo los degrada
de su cualidad de adultos responsables a la de infantes desvalidos, sino que,
en situaciones como la que estamos viviendo, resulta contraproducente.
José Antonio Quiroga Quiroga
Así son las cosas, y así nos las cuentan.
ResponderEliminarEnough already!
Creo,amigo Parri,que pretendes decir ¡basta ya! en inglés. Si es así, me parece que has recurrido a una máquina o programa como fuente traductora. Las expresiones más utilizadas en ingles para decir ¡basta ya! son, entre otras, that´s enough, y enough´s enough.
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