¡Ale hop¡ de
la mano del concejal de Deportes y Turismo,
Laureano Alonso, ha llegado a Tuy
la política del espectáculo con los
números circenses: el hula hoop, las paradas moteras, el flyboard y el hip hop.
Este representante público, “que sabe latín” posee un discurso errático y
embarullado, valga como ejemplo: el haber aprovechado una comparecencia en la
RMT para descalificar al portavoz
municipal del partido Liberal, utilizando el recurso de equipararlo en su
extravío, por liberal también, con Jesús Gil y Gil, incidiendo en la
particularidad de que éste hablaba con su caballo Imperioso, y con Calígula,
que sentaba a la mesa a su caballo Incitatus (dudo que un caballo para comer en
una mesa se siente, en el suelo o en una silla), y tiene como inquietud
destacada, por su fiel puntualidad, la de compartir a diario en Facebook los
chistes de un periódico provincial. Este delegado de Turismo, que ha decidido
que Tuy no tenga este año representación en FITUR (Feria Internacional de
Turismo) porque, aparte de que tendrían que desplazarse a Madrid el alcalde y él
mismo (un gasto), la oferta tudense en 2016 fue ninguneada por los representantes
de la Xunta, que dedicaron atención preferente
a la promoción de otro ayuntamiento; como si tal suceso fuese argumento
determinante para no volver y constituyese precedente de exclusión a perpetuidad.
Este concejal
fastuoso, marchoso como ninguno, también la va el Zumba, ha
aplazado hasta dentro de un año, “por falta de dinero” la reparación del
saneamiento del campo de futbol que utiliza el Tyde, que lleva años contaminado
el agua de la traída vecinal de 21
familias de un barrio de Randufe.
Resulta que la
tubería que recoge las aguas de los aseos de dicha instalación, que
utilizan deportistas y público, y que atraviesa la grada por el
subsuelo, filtra en abundancia las aguas fecales de dichos aseos debido a la
mala ejecución (separaciones de juntas entre tubos de hasta cuatro centímetros), y al avanzado deterioro de las paredes, está
contaminando, con multiplicidad de bacterias: Escheriquia Coli, Clostridium Perfringen,
hongos y sustancias transgénicas, de procedencia de champús, dicha traída de aguas,
de la cual se abastecen en exclusiva unas cien personas. Como la reparación de
dicha tubería solo cabe hacerla con tecnología avanzada: introduciendo una
camisa resistente en el interior de dicho colector de fecales, que luego es
hinchada con gas a alta presión de modo que queda adherida a la superficie
interior de la tubería, supone un coste de 15.000 euros, según presupuesto de la empresa que inspeccionó,
la solución dada por dicho concejal a la Comunidad de Aguas
Vecinal ha consistido en limpiar dicho
colector (limpieza realizada por la empresa de un concejal del PP), medida que
en nada contribuye a que no sigan produciéndose fugas, y aplazar su reparación
hasta pasado un año, plazo después del cual
la Diputación proporcionaría la
cantidad necesaria a tal fin. El supuesto capitán de la nave municipal, que está al tanto de todo, calla y
otorga.
Esta situación
apremiante pone a los comuneros en el dilema de cortar el suministro, y dejar
sin abastecimiento a los vecinos, o correr el riesgo de que algún usuario pueda
contraer una enfermedad, que de ser
grave podría causar la muerte del infectado, e incurrir en responsabilidad
penal. En mayor responsabilidad incurrirían las autoridades municipales como
responsables directas de la contaminación, y por semejante e incomprensible
negligencia. No cabe entender, desde ningún ángulo mínimamente juicioso la
actitud adoptada.
La excusa,
impresentable ante una emergencia sanitaria, de que no hay dinero es falsa ya
que existen instrumentos legales, muy habituales en el ámbito municipal, que
permiten cubrir la contingencia: la modificación y transferencia de créditos, que
consiste en transferir dinero de una partida presupuestaria a otra en la que
escasea, o el acudir al tan cacareado superávit (de 1,6 millones en 2016) o al remanente
de tesorería acumulado en años anteriores, cifrado en más de seis millones.
Suerte tiene
el grupo de gobierno que este asunto no haya
trascendido a ciertas instancias administrativas como el SERPRONA,
Sanidad o de la Demarcación Hidrográfica Galicia- Costa, porque se las iban a
ver muy tiesas.
Por distintos
motivos vamos viendo cómo se desatiende lo fundamental, incluso en temas de la importancia
y trascendencia como la salud pública, y se centran los esfuerzos en lo festivo,
de mayores réditos electorales.
A la política
de evasión, efímera y evanescente, del señor “Loreano Alonso”, como
acostumbra a llamarlo un concejal de la oposición, bien podría denominarse la
política LOREAL, por semejanza con la línea de productos de maquillaje L`Oréal de
Paris de Noya.
José Antonio
Quiroga Quiroga
Fale do Padín, por favor, e deíxese de productos de maquillaxe.
ResponderEliminarBen Quiroga, a esquerda non sabe encaixar as críticas pero a capacidade e criterios de xestión de Lano deixan moito que desexar.
ResponderEliminarNon foi o alcalde concelleiro de Medio Ambente en Salceda?
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